Pequeñas y medianas empresas dedicadas a brindar el servicio de transporte turístico dentro y fuera del departamento de Rivas, no han escapado a las afectaciones causadas por la crisis socio política que atraviesa Nicaragua desde el 18 de abril.
Según propietarios de estos negocios, sufren una recaída en la demanda del servicio de transporte turístico de hasta un 80%, debido a que la llegada de turistas al país ha descendido desde que estalló la crisis en Nicaragua.
Estos negocios son contratados por hoteles y extranjeros y tour operadoras para trasladar a turistas que ingresan por el Aeropuerto Internacional Augusto César Sandino, la Frontera de Peñas Blancas y el Aeropuerto Costa Esmeralda del municipio de Tola.
También se dedican a llevarlos a diversos destinos turísticos del país, pero los responsables de estas pequeñas y medianas empresas aseguran que están siendo golpeados por la poca afluencia de turistas.
Jorge Novoa, propietario de una pequeña empresa de transporte turístico que estableció en el 2013, dijo que la demanda de viajeros inició a caer de manera estrepitosa a partir de junio y desde ese momento “estoy operando al 20% de mi capacidad y me vi obligado a cancelar los contratos laborales de cuatro conductores”, indicó.
Al igual que el sector hotelero, Novoa asegura que las empresas de transporte turístico, dependen de la llegada y estadía de turistas en el país, pero asegura que los servicios se han visto afectados con la cancelación de reservaciones de turistas que tenían planificado llegar al país.
Con los seis vehículos que dispone su negocio, incluyendo tres microbuses, Novoa tiene capacidad para movilizar a 58 pasajeros al día, pero asegura que debido a la ausencia de turistas realiza entre 3 y 4 viajes por semana con grupos de 2 a 4 personas en cada uno de sus viajes.
“Yo estoy sobreviviendo en mi negocio con el traslado del personal de seguridad que presta el servicio en el complejo turístico de Mukul, porque ante la ausencia de extranjeros, la mayoría de los vehículos permanecen varados”, indicó.
Alysson Arcia, que está a cargo de otro pequeño negocio de transporte turístico ubicado en el municipio de Moyogalpa de la Isla de Ometepe, confirmó que en este destino turístico, la situación es similar.
Aseguró que en su negocio familiar solían trasladar entre 18 y 20 turistas al día, “pero en la actualidad los vehículos permanecen varados la mayor parte del tiempo porque no hay flujo de turistas hacia la Isla de Ometepe y los pocos que ingresan optan por el transporte público y no el privado”, relató.
En San Juan del Sur, la situación se repite dice el emprendedor Miguel Gómez, propietario de uno de los 21 negocios de trasporte turístico que se han establecido en este municipio.
Según Gómez, antes en su pequeña empresa trasladaban en promedio a 80 turistas a la semana y en la actualidad, sus seis vehículos permanecen días a la espera de extranjeros que deseen viajar a diversos destinos turísticos del país.
Como evidencia del mal momento que atraviesa esta rama de la industria turística, Gómez aseguró que en los últimos dos meses, solo ha realizado tres viajes al aeropuerto Internacional Augusto César Sandino.
“Los extranjeros no están ingresando por el Aeropuerto Internacional, y los que llegan a San Juan del Sur provienen de Costa Rica o Tola, pero la demanda de transporte se ha esfumado y he tenido que despedir a tres conductores”, asegura Gómez.
Según el Mapa Nacional del Turismo Nicaragüense, en este departamento existen más de 50 pequeñas y medianas empresas de transporte turístico, que se han establecido en puntos estratégicos como San Juan del Sur, Tola y la Isla de Ometepe, y según los propietarios, el único servicio que mayor demanda tienen actualmente es llevar a extranjeros a la Frontera Sur.
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