Benedicto XVI dejará de ser Papa dentro de exactamente 17 dÃas, el próximo dÃa 28 de este mismo mes, por "falta de fuerzas". El anuncio lo ha realizado esta mañana en persona el propio PontÃfice, en latÃn, durante un consistorio en el Vaticano para la canonización de unos mártires. El pontÃfice fue elegido el 19 de abril de 2005.
Joseph Ratzinger, de 85 años, tiene toda una retahÃla de achaques: en 1991 sufrió un ictus y con anterioridad ya padeció complicaciones cardiovasculares. Además, tiene problemas de hipertensión y, de hecho, muchos consideran que fue ésa la causa del posible desmayo que sufrió en 2009 durante unas vacaciones en las montañas del Valle de Aosta y que hizo que se rompiera la muñeca derecha. De hecho, Ratzinger sigue una dieta rigurosa y los médicos le han prohibido poner el pie por encima de los 2.000 metros de altitud. Es por ello por lo que los dos últimos años ha renunciado a pasar los veranos en la montaña para quedarse en Castel Gandolfo.
Además de los problemas de corazón, apenas ve por el ojo derecho, sufre un 50% de artrosis en la cadera derecha, padece hipertensión, se cansa cada vez más... Desde hace tiempo camina con bastón y utiliza una plataforma con ruedas empujada por empleados del Vaticano para desplazarse por la BasÃlica de San Pedro. En los últimos meses, siempre por motivos de salud, ha disminuido sus compromisos públicos, sus viajes y las audiencias.
"Cuando un Papa alcanza la clara conciencia de que ya no es fÃsica, mental y espiritualmente capaz de llevar a cabo su encargo, entonces tiene en algunas circunstancias el derecho, y hasta el deber, de dimitir", aseguró el propio Benedicto XVI en 2010 al periodista alemán Peter Seewald en la larga entrevista publicada en forma de libro bajo el tÃtulo 'La Luz del Mundo'. Y ese dÃa ya ha llegado.
Sin hoja de ruta establecida
Ahora bien, anunciada la dimisión, no existe una hoja de ruta establecida para el relevo de Benedicto XVI. Juan MarÃa Laboa, experto en la materia, apunta que "en el derecho canónico no hay nada contemplado para una situación como ésta. Hasta el dÃa 28 de febrero, a las 20.00 horas, el Papa sigue siendo la máxima autoridad de la Iglesia y será él quien decida junto al Consistorio cuáles son los pasos a dar".
Respecto a qué PontÃfices renunciaron anteriormente al ministerio papal, se menciona sólo a uno: Celestino V (en el año 1294), conocido como el 'Papa del gran rechazo'. Sin embargo, para muchos historiadores también habrÃa que contar con la marcha de Gregorio XII, en 1415.
Una 'dimisión' por sorpresa
Las reacciones al anuncio de Ratzinger se disparan ahora por todos los puntos del planeta. E incluso dentro del propio Vaticano, donde, "ni los ayudantes más próximos" del Papa, conocÃan el anuncio que iba a realizar su Santidad. "Nos pilló por sorpresa",ha confesado Federico Lombardi, el portavoz del Vaticano. Aunque se ha filtrado que en realidad algunos cardenales, como Angelo Sodano, decano del colegio cardenalicio, estaban al corriente de la decisión.
Lombardi insistió en el mensaje lanzado por Ratzinger en 'La luz del mundo', dejando claro: "Se puede dimitir en un momento de serenidad o cuando ya no se puede más, pero no en el momento del peligro". Y reiteró que el Papa no tiene ninguna enfermedad en especial, sino que lo que más le pesa es la edad: en abril cumplirá 86 años.
El portavoz adelantó a su vez que Joseph Ratzinger se trasladará a la residencia de Castel Gandolfo cuando comience el proceso de Sede Vacante (el tiempo que transcurre desde que un Papa fallece o renuncia hasta que se elige sucesor) y una vez que haya nuevo Sumo PontÃfice se retirará a un monasterio de clausura dentro del Vaticano.
Todo apunta a que el cónclave para elegir sucesor se celebrará en marzo. En él, participarán 120 cardenales del Colegio Cardenalicio vaticano, que debatirán en la Capilla Sixtina (aislados, sin poder ponerse en contacto con el exterior) hasta que haya 'fumata blanca'.